Juan Soriano | Mérida www.hoy.es 15/01/2009
Se sabía que estaba ahí, pero se desconocía en qué condiciones se iba a encontrar. La excavación que la Consejería de Cultura, a través del Consorcio de la Ciudad Monumental de Mérida, está llevando a cabo en el cine-teatro María Luisa ha sacado a la luz un gran lienzo de la muralla de la ciudad.
Esta actuación forma parte de la obra de rehabilitación del edificio, a la que la Junta de Extremadura, el Ayuntamiento de Mérida y el Gobierno central destinarán 3,3 millones de euros.
Antes del inicio de los trabajos, era necesario acometer una intervención arqueológica. Entre otros motivos, para descubrir la muralla oculta tras uno de los muros del cine. Este hallazgo se integrará en la nueva disposición arquitectónica del inmueble, que el Consistorio espera poder inaugurar en el año 2011.
El cine-teatro María Luisa es un edificio catalogado propiedad de la Junta de Extremadura desde 1989 y cedido por un periodo de 99 años al Ayuntamiento de Mérida, que a cambio asumía el mantenimiento.
La intervención arqueológica financiada por Cultura se está llevando a cabo desde finales de 2008 bajo la dirección del arqueólogo Pedro Delgado. La actuación se ha centrado en dos partes: por un lado, la recuperación del lienzo de muralla y, por otro, los sondeos arqueológicos en el patio de butacas del cine-teatro.
La muralla
La construcción del edificio, que concluyó entre los años 1930 y 1931, amortizó un lienzo de la muralla de la ciudad. Concretamente, se trata del trazado que puede verse por la calle Arzobispo Mausona, junto a la torre albarrana de época medieval.
Tal como ha aparecido ahora este paramento, parece que simplemente se lució el muro para adecuar una de las paredes interiores del cine-teatro, lo que además afectó de forma significativa a la configuración final de todo el edificio.
La actuación del Consorcio ha consistido en retirar el lucido de la pared interior del cine para descubrir la muralla. El resultado ha sido el esperado, pero aún hay varios datos que deben ser corroborados para evaluar de forma correcta el hallazgo, que podría aportar novedades sobre el entramado defensivo de la colonia romana en época fundacional, en el siglo I a. C.
Una de las hipótesis que barajan los investigadores es que se trata de la muralla romana original, que posiblemente sufrió una disminución de su grosor, no se sabe si durante la obra del cine-teatro o en fechas anteriores. Sin embargo, no se descarta que se trate de parte del muro defensivo de la ciudad, pero de época medieval.
Lo que parece claro es que se trata de la muralla, por los materiales empleados (sillares) y por la disposición de las piezas. Se espera que las nuevas catas que se realizarán en el interior del edificio aporten más luz.
Lo mismo sucede con uno de los elementos que forman parte de este tramo de muralla. Los trabajos han permitido distinguir dos columnas de sillares, de 1,20 metros de anchura cada una, entre las que se encuentra un vano de unos 3,20 metros cubierto por piedras y materiales de mampostería. Debido a esta disposición simétrica, una de las posibilidades que se maneja es que se trate de una puerta, aunque también podría ser el arranque de una torre o simplemente un refuerzo realizado en épocas posteriores.
Las catas
En cuanto a las catas arqueológicas, prácticamente han estudiado todo el patio de butacas del cine-teatro. El resultado ha sido negativo, ya que no se ha encontrado ningún resto de interés, por lo que se dará vía libre al proyecto de rehabilitación del edificio, que en este punto pretende rebajar el suelo para adecuar nuevas dependencias.
Como apunta la Consejería de Cultura de la Junta de Extremadura, en la actualidad se trabaja en tareas de limpieza de la muralla para determinar su origen, además de algún sondeo complementario que pondrá fin a la intervención arqueológica.