M. V., Valencia www.levante-emv.com 17/04/2008
La excavación de la calle Ruaya, que ha sacado a la luz una construcción hidráulica del siglo III a.C., la más antigua de la actual ciudad de Valencia, está paralizada desde hace un mes.
Según el concejal socialista Juan Soto, el motivo de esta situación es «el litigio que existe entre la constructora -la firma que tiene la concesión para edificar el aparcamiento subterráneo previsto en el solar- y el ayuntamiento».
Tras llevar a cabo la primera fase de las labores arqueológicas, el hallazgo de elementos íberos y romanos ha obligado a ampliar las excavaciones para desenterrar todos los secretos que guarda el descampado. Esto, evidentemente, ha aumentado el plazo de trabajo y el coste. «El proyecto de la segunda fase -que consistirá en excavar el nivel romano y el íbero- asciende a 500.000 euros», agregó Soto. «Pese a que en su momento la alcaldesa fue de gira por la excavación, ahora demuestra que sólo acudió a hacerse la foto», afirmó, ya que «es incapaz de garantizar la continuidad de los trabajos».
A pesar de esta situación, Soto exigió la continuidad de los trabajos arqueológicos y «la documentación que se está elaborando sobre todo lo descubierto, algo fundamental para aprender más del pasado de esta tierra».
«Complejo de Indiana Jones»
El concejal de Patrimonio, Alfonso Novo, negó ayer tajantemente la supuestas diferencias entre el ayuntamiento y la empresa constructora a las que se refiere el edil socialista Juan Soto, de quien dijo que «tiene complejo de Indiana Jones». «Parte de ese presupuesto lo asumirá la firma concesionaria del estacionamiento y parte el consistorio, porque entendemos que esos hallazgos arqueológicos son importantes para la ciudad», afirmó.
Esta postura, añadió, obedece a la intención municipal de «evitar que las futuras plazas de aparcamiento se sobrevaloren y lo que antes le iba a costar 15.000 euros al ciudadano, suba a 30.000 euros después de que la empresa añada el sobrecoste de las excavaciones». Por eso, «el ayuntamiento participará económicamente en el proyecto».
