Carles Gosálbez | Tarragona www.diaridetarragona.com 13/11/2009
Un sarcófago de plomo de época romana que fue sepultado por una empresa constructora tras hallarlo en el solar donde levanta un edificio, ha sido desenterrado por segunda vez y trasladado al Museu Nacional Arqueològic de Tarragona para proceder al análisis del ataúd y del esqueleto que contiene.
La localización del sarcófago y su posterior ocultación colocando una plancha de hormigón encima, trascendió a la opinión pública a inicios del pasado mes de octubre. La Guàrdia Urbana, la Fiscalía y el Departament de Cultura se interesaron por el descubrimiento y, muy especialmente, por la intervención de la empresa.
Los hechos se produjeron en un solar en construcción localizado entre el Hotel Astari y la calle Ernest Lluch, ubicado a treinta metros de distancia del trazado de la vía férrea.
Expediente sancionador
El Departament de Cultura intervino en el asunto y abrió expediente sancionador contra la empresa, por entender que la ocultación del sarcófago contradice lo establecido por la Llei del Patrimoni Cultural de Catalunya.
El director de los Serveis Territorials de Cultura, Adam Manyè, declaró ayer al Diari que «estoy satisfecho por la colaboración de la promotora, pero el expediente sancionador continúa adelante y no se puede frenar, puesto que el acto incorrecto existe».
El sarcófago de plomo fue localizado en un espacio del solar afectado por la construcción de unas cocheras. Tras ser descubierto, se colocó encima una plancha de hormigón, de manera que no quedó afectado ni resultó dañado por esta actuación.
A requerimiento de Cultura, la empresa devolvió el ataúd romano a su situación inicial, para que lo fue necesario retirar la plancha de hormigón que lo ocultó durante unos días. Manyè recalcó que en ningún momento «hormigonaron el sarcófago», como se apuntó cuando se tuvo conocimiento de la acción.
Sólo había un sarcófago
El director de los Serveis Territorials añadió que «cerca del ataúd se han localizado presuntos restos de tejas que podrían pertenecer a un enterramiento, pero están muy troceados». Manyè añadió que, finalmente, hacia el mes de octubre «sólo apareció un sarcófago de plomo y no dos como se dijo, pero el encontrado es muy largo».
El responsable del Departament de Cultura en Tarragona resaltó que el féretro «se ha salvado» y «ahora estamos a la espera del resultado de su análisis por el Museu Nacional Arqueològic para disponer de más información».
Manyè subrayó que desde el instante en que se tuvo conocimiento del asunto «la empresa promotora se puso a nuestra disposición y ha costeado los trabajos arqueológicos que ha representado desenterrar el sarcófago».