Girona | EFE 29/01/2010
Esta intervención se enmarca en el proyecto europeo «Sopra e sotto. La Città Euopea», del programa CULTURA, en el que participan el Ayuntamiento de Brindisi (Italia) como organizador principal, con la participación como socios de L’École Nationale Supériore d’Architetture de Toulouse (Francia), la Universidad y el Ayuntamiento de Girona.
Los trabajos, que han durado tres semanas, han permitido descubrir también varias tumbas cristianas y una romana que, según los expertos, podrían pertenecer a algunos obispos o personas destacadas de la época.
Según ha explicado el arqueólogo y responsable de las excavaciones, el catedrático Josep Maria Nolla, no han aparecido restos humanos, lo que indicaría que, posteriormente, los cuerpos fueron trasladados a otro lugar.
«Ha aparecido una serie de tumbas en batería, bastante bien conservadas, algunas de ellas muy antiguas y que no presentaban ni un solo fragmento humano», ha detallado Nolla.
El experto ha subrayado que se encontraron «unos clavos en madera y, por lo tanto, había habido alguien enterrado dentro de un ataúd pero, cuando desmantelaron la iglesia antigua para hacer la nueva, debieron recoger todas estos restos óseos y enterrarlos en otro lugar».
El catedrático ha explicado que la tumba del santo que trajo el cristianismo a Girona, San Feliu, muerto en el año 304, «ni ha aparecido ni aparecerá nunca, pero la planta del edificio es única».
«Tendríamos una iglesia con un ábside dentro del cual situaron por fuerza la tumba inicial del santo, de la que no queda nada (…), pero tenemos evidencias, indicios suficientes para saber que era así», ha indicado.
El proyecto europeo al que se ha acogido Girona se centra en la búsqueda de soluciones a algunos de los problemas que tienen las ciudades de dimensiones medianas para conocer su pasado histórico y urbanístico cuando la explotación de los yacimientos arqueológicos de interés se encuentra en medio de un tejido urbano.