Pedro M. Espinosa | Cádiz www.diariodecadiz.es 13/05/2012
Monumentos Alavista ya ha comenzado a trabajar en el interior del inmueble y está a la espera del permiso de Cultura para dar luz verde al proyecto del SPA.
En el Pópulo, de camino a la que está considerada la plaza conservada más antigua de España, la de Fray Félix, se construyen unas termas romanas que están destinadas a convertirse en uno de los grandes atractivos del barrio artesanal de Cádiz. Mientras que el proyecto del hotel de la Casa del Almirante sigue en compás de espera, pendiente de un acuerdo entre su promotor con Hotusa, una cadena hotelera internacional que ya controla otros dos establecimientos en la ciudad, la empresa Monumentos Alavista quiere que dentro de un año pueda realizarse un viaje en el tiempo hasta la antigua Roma con sólo penetrar en un inmueble de la calle Obispo José María Rancés. El promotor de este proyecto, Germán Garbarino, informaba estos días que los trabajos para derribar el forjado antiguo y comenzar a construir la estructura nueva ya han arrancado, y que están pendientes de recibir los permisos de la Consejería de Cultura para centrarse en el Spa, que tendría un plazo de ejecución de unos nueve meses. Estos permisos son necesarios porque la obra se realiza encima de parte del Teatro Romano de Cádiz.
Las termas gaditanas recrearán el ambiente de la capital del imperio romano y tendrán una superficie de 480 metros cuadrados en los que se podrá disfrutar de varias piscinas a distinta temperatura en un ambiente espectacular, con más de 40 estatuas de diosas y emperadores, con frescos y moisacos en las paredes y todo lo que haga recordar a los clásicos baños romanos del siglo I después de Cristo. Monumentos Alavista está trabajando igualmente en la reproducción de varias piezas que han ido aparecienco en la provincia gaditana, tal que el que se encontró en Puerto Real en 2004 y que representa al Dios Baco.
Germán Garbarino comentó que el presupuesto para el recinto de las termas es de unos 400.000 euros, idéntica cantidad a la que irá destinada al resto del inmueble, que en sus plantas superiores contará con viviendas. «Con esos 800.000 euros esperamos poder tener listo el proyecto», que en principio pretendía abrir sus puertas el próximo otoño pero que posiblemente tenga que esperar hasta el verano de 2013.
Para el Pópulo, un barrio al que el Plan Urban quiso convertir en el centro de la artesanía de la ciudad pero que con el paso del tiempo no sólo se ha quedado en eso, sino también en uno de los puntos claves de la hostelería, la inauguración de las termas romanas puede suponer un impulso, un complemento a su oferta, que quedaría más redonda si cabe con el hotel de la Casa del Almirante, cuyas obras siguen paradas. Germán Garbarino y su empresa también se ha ocupado de trabajar en el interior de este inmueble, del que incluso tiene la llave para enseñar a algunos promotores hosteleros que se han interesado. «Claro que sería importante para el barrio la apertura del hotel», dice, aunque no tiene tan claro que esto vaya a ser posible en un futuro inmediato, ya que las negociaciones con Hotusa «las llevo yo oyendo hace tres años y todavía no han fructificado. Ojalá que lo hagan y que puedan acabarse los trabajos», reconocía.